lunes, 3 de octubre de 2011

XVIII CONFERENCIA ANUAL DE MADRID. (Octubre de 1.964)

Seguimos “rescatando” reseñas de lo que fueron las famosas conferencias de Octubre en la iglesia de Trafalgar, 32 (Madrid). En esta ocasión presentamos la XVIII Conferencia según reseña aparecida en la revista “Edificación Cristiana”, en fecha de septiembre-octubre de 1.964:

“La decimoctava conferencia no es ya un programa a cumplir, sino que es objeto de crónica y comentario de quienes habiendo asistido, vueltos a sus lares cuentan en sus casas e iglesias lo que han visto, oído y sentido. Porque, ver a los santos congregados, oir la Palabra, y sentir profundamente la presencia del Señor, son tres experiencias que resultan de promover la vida espiritual, en aplicación de sencillos postulados nuevo-testamentarios, “Juntos”, “La Palabra”, “El Señor”, todo ello envuelto en un espíritu de oración.
Cuatro días, amén del culto de Apertura y Bienvenida, de apretado trabajo espiritual. Sería excesivamente extenso reseñar todo este trabajo en su precioso detalle, ya que todas las actividades y cultos de la Iglesia, tuvieron su lugar y hora. Obreros del Señor y Ancianos de las asambleas, en cálidos cambios de impresiones sobre la Obra y su desarrollo en España, reuniones de juventud, se Señoras y Señoritas, Predicación de la Buena Nueva, Ministerio de la Palabra, Estudio Bíblico, Escuela Dominical y Culto de Adoración.
Creemos que la conferencia toda se ha movido alrededor del sencillo y a la vez sólido bloque de doctrina ministrada en el Estudio Bíblico, estructurado esta vez en el grave y reflexivo texto de la Epístola a los Efesios.
Nuestras mentes renovaron, con la claridad de las ideas expuestas con orden y vigor, por D. Fernando Pujol, la firme convicción de una “Iglesia elegida en Cristo”.El crecimiento y el Ministerio en la Iglesia” son temas que en la Epístola a los Efesios tienen una diafanidad tal que cualquier incorporación de conveniencias episódicas, a través de los siglos y las civilizaciones, queda evidente en seguida como cuerpo extraño e inconveniente. Don Ernesto Trenchard dirigió la atención de nuestras mentes hacia el contenido elemental e incontrovertible del texto paulino. La parte práctica de la epístola, desglosada en dos extensos y ordenados estudios, a cargo de don Pablo Wickhan y don Eric Bermejo, titulados: “La iglesia de los Hijos de Luz” y la “Iglesia Militante”, dejó una impresionante evidencia de la necesidad de mantener estrechamente vinculada la dirección vital de nuestros actos, al repertorio de nuestras convicciones cristianas, confiando en la guía y poder del Espíritu Santo.
No podemos por menos que dar gracias al Señor por su cuidado al levantar en estos cuatro días un monumento (en el más estricto sentido de esta palabra) de clara amonestación y amoroso estímulo.
Los reportajes, como siempre, movieron las corrientes de simpatía hacia zonas, grupos y situaciones, que algunas veces olvidamos, pero que si anotamos cuidadosamente merecen ser tenidos en cuenta en oración ante el Trono de la Gracia.
... Y entrelazándolo todo, el abrazo, el apretón de manos, la mirada gozosa de gente que se saluda sabiendo que va al cielo, dispuesta mientras a dar testimonio de la salvación que es en Cristo Jesús, viviendo santa, justa y píamente, esperando la manifestación del Gran Dios y Salvador nuestro. Amén.”


Foto: Coro de Trafalgar.

No hay comentarios: