“En un hermoso culto, tuvimos el gozo de encomendar a la
gracia de Dios a nuestro querido hermano Luis Pedreira, quien sale totalmente
por fe para servir al Señor en las facetas de la Obra en que Él en adelante
vaya indicando. De momento, nuestro hermano está trabajando con el bibliobús
que los hermanos de Valladolid tienen para testificar del Evangelio, así como
atender a los cursos por correspondencia que se suscitan y todo lo relativo al
Centro de Difusión Bíblica que allí tienen establecido.
La encomendación fue promovida por la iglesia en
Valladolid, pero todas las allí representadas, por medio de hermanos presentes
o por medio de cartas, se asociaron efusivamente al acto con sus oraciones en
pro del servicio y del sostén de este obrero que tanto tiempo ha estado
ayudando a unos y a otros en tantos lugares de
Madrid, Gijón, Galicia, etc.
La reunión se desarrolló de un modo muy espontáneo y
guiada por el Espíritu Santo, pues el que presidía –nuestro querido hermano don
Eric Bermejo- abrió el camino para que todos los visitantes de cada iglesia
expresaran su sentir y orasen por lo que se estaba haciendo y, así, tuvimos
muchísimas intervenciones de diversos lugares de España que leían textos
oportunos, oraban y hablaban de su identificación con el acto, unos porque
conocían a Luis de cerca y otros porque habían sabido de su deseo de servicio y
amor por la Obra del Señor. Después el mismo hermano Pedreira nos expresó con
palabras emocionadas su sentir y su agradecimiento al Señor y a los dos siervos
que más habían sido utilizados por Él para su formación –don Ernesto Trenchard
y don Eric- y, seguidamente, tuvimos un mensaje, corto por lo avanzado de la
hora, de nuestro hermano y compañero de estudios de Luis, Pedro Inglés. Cuando
nos despedimos, todos estábamos seguros de haber estado presentes en algo que
era la voluntad del Señor y de que Él había de guiar a su siervo, ya que todo
lo que allí se había hecho nos hablaba de amor y sujeción a la Palabra de Dios.
También desde estas líneas los componentes de la
Redacción de esta revista, que conocemos a Luis de cerca, nos identificamos con
él en este paso y lo encomendamos con nuestras oraciones al Señor para que
siempre tenga su clara guía y su sostenimiento en cualquier detalle de su labor
y vida diaria. Igualmente, sirva lo dicho para invitar a nuestros queridos
lectores a un intenso ejercicio de oración por todos estos hermanos que
abandonan sus medios normales de subsistencia, debidamente reconocidos por su
iglesias, y por otros hermanos, como aptos y llamados por el Señor para que
todos juntos estemos preparados a seguir edificando sobre el único fundamento
válido que es nuestro Señor Jesucristo.”
Publicado en la Revista “Edificación Cristiana”, número
11 de 1.973
Nota: para más información sobre el hermano Luis Pedreira
consultar la página web de FONDEVAN aquí.
Foto: reunión de encomendación.
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